Supervivencia. Esa es la palabra que resume el cine visto en este 2013. La mayoría de los films que encontraréis en esta lista tienen este mismo eje común: esperanza ante las adversidades en las que se encuentran, ya sea en el instituto, con sus parejas o incluso en naves espaciales.
Este año, el blog ha decidido ampliar la lista de las elegidas a 15, añadiéndoles orden preferencial, a diferencia de las ediciones previas en los que se ponían siguiendo el criterio del tipo alfabético.
Es una lista muy variopinta pero con cintas de una calidad envidiable en la que se han quedado fuera algunas propuestas muy interesantes.
Empieza la cuenta atrás, como se diría en la lista de los 40 Principales, en 3, 2, 1...
Tarantino dirige esta película que no renuncia a su peculiar estilo, mezclando el humor con el espaguetti western más setentero. A pesar de su duración, es una gozada y nos demuestra que este cineasta es incansable con un estilo más que definido. Además cuenta con las actuaciones del doblemente oscarizado Christoph Waltz y de un olvidado Samuel L. Jackson que está extraordinariamente bien y del que habría que reivindicar. Por estas razones, "Django Desencadenado" merece estar en este top.
Esta joya serbia merece ser vista. Es una historia en la que las situaciones de venganza y las de perdón se cruzan dando lugar a escenas entre los personajes que son grandiosas. El elenco está formidable y la conclusión con la que se termina deja en el aire un debate muy jugoso sobre lo ético que tienen las guerras. Una obra claramente a reivindicar y que si no hubiese sido por el Festival de Cine Europeo de Sevilla, probablemente me habría perdido.
13) ZERO DARK THIRTY (LA NOCHE MÁS OSCURA) de Kathryn Bigelow
Con "En Tierra Hostil", Kathryn Bigelow se convirtió en la primera mujer directora de cine en ser oscarizada. Voces críticas pusieron el grito al cielo mencionando que se lo habían dado por ser mujer,
no por la calidad de la película. Con "Zero Dark Thirty" calla todas esas bocas y hace un auténtico ejercicio histórico de calidad del que no se le puede pegar ninguna pega significativa. A destacar su buen montaje de sonido y a la inmensa y contenida actuación de Jessica Chastain, una de las mejores actrices de su generación.
Actualmente, es la mejor saga (taquillera) con la que un espectador se puede encontrar en una sala de cine. Cada entrega que pasa va a más, y tanto en las actuaciones como en lo que a aspecto técnico se refiere, se nota una mejoría bestial. En esta segunda parte, Jennifer Lawrence está que se sale y no se pone con el "modo automático", muy cómodo, pero que finalmente es poco creíble en otros actores más limitados. El trabajo de vestuario y maquillaje es una pasada. Además, si le añadimos la canción de Coldplay, "Atlas"...
Es el melodrama del año. Esta historia te llega directamente al corazón a través de un acontecimiento que unió a muchas personas en España, la final del mundial de fútbol del 2010. Simpática y con un final que emociona, no incluirla en esta lista me parecería un terrible error. Su punto fuerte es el guión. En la línea de su anterior obra "Primos", Sánchez Arevalo nos enseña una radiografía de la sociedad actual española. Y qué queréis que os diga, ante tanto talento, es imposible no caer rendido. Ole, ole y ole.
Porque David O'Russell sabe retratar a la perfección las tensiones familiares y con una gracia inusual y naturalidad muy destacables. Bradley Cooper nunca ha estado mejor y tiene una química con Jennifer Lawrence realmente envidiable. Robert De Niro por su parte vuelve a demostrar lo buen actor que es pese a tenernos un poco mal acostumbrados con sus anteriores películas y está de sobresaliente. Probablemente, junto a "La Gran Familia Española", las que mejor cuerpo dejan tras el visionado.
Este thriller nos da las 150 minutos más intensos de este año. A pesar de breves bajones de ritmo, "Prisioneros" es muy buena y como principal baza tiene un elenco tremendo, desde un Hugh Jackmandemostrando su versatilidad como actor dramático hasta una Melissa Leo cuyos niveles de crueldad resultan inesperados para el espectador. Menciones aparte para Jake Gyllenhaal (desde "Brokeback Mountain" no me había encantado tanto) y la dirección del canadiense Denis Villeneuve. Fotografía de Roger Deakins sensacional.
Por hacer su mejor cinta hasta la fecha y porque tiene la capacidad de dejarte con la tensión por las nubes hasta el final (juego de palabras con spoiler incorporado). Sus momentos cómicos funcionan gracias al saber hacer de Alan Arkin y de John Goodman y al finalizar deja un excelente sabor de boca. El guión escrito por Chris Terrio está genial desarrollado y resuelto. Es una película muy grande y amarla es lo más indicado, por buscar aspectos por los que detestarla resultará inútil.
Entrañable a más no poder y con un contenido en lo que a amistad se refiere tremendo. Me sentí muy identificado con algunas de las escenas que se muestran y no emocionarse con el final debería ser considerado un delito. Los 3 protagonistas son puro carisma, simplemente por sus interpretaciones y no por el aspecto físico de los mismos. Emma Watson no quiere ser para siempre Hermione Granger, y gracias a su trabajo en este film nos da un "tironcillo" de orejas para que la tengamos muy en cuenta en un futuro.
Sorpresa total. La película revelación de este año. Juega con las emociones del espectador y si entras en el juego te hará sentir cosas que otros films pretendían y que finalmente no consiguieron. La pareja protagonista, muy convincente. Las partes musicales podrían entorpecer el desarrollo de la historia, pero para nada, la enriquece. La fotografía y el montaje no pierden la esencia de carácter europeo e independiente, siendo una cinta que es a pequeños rasgos, bastante comercial. Una experiencia que hay que vivir.
Por mostrar la homosexualidad con la naturalidad con la que todavía no se había mostrado (o querido) en pantalla. La interpretación de Adèle Exarchopoulos es impactante y muy bien construida. El peso dramático lo asume ella y para ser una actriz que está en sus comienzos asusta el talento con el que lo asume. Aunque le sobran quizás algunos minutos de escenas de sexo, si que es verdad que en las 3 horas de duración es imposible no amar a esta chica francesa y su correspondiente descubrimiento de la identidad sexual.
Por ser el evento cinematográfico del año. El uso del 3D supera al visto en "Avatar" y a servidor lo dejó impresionado días después de haber visto la película. Sandra Bullock hace el papel de su carrera y no hace más que aumentar su posición de estrella absoluta de Hollywood. La banda sonora de Steven Price en sus últimos temas erizan la piel. Sin duda alguna, la propuesta más arriesgada y tensa a la que me he visto enfrentado este 2013 y de la que todavía pasados ya 2 meses, todavía no he olvidado.
No me podía olvidar de Richard Parker. Ang Lee firma una auténtica oda a la fe y a la esperanza a través de los ojos del joven Pi concentradas en 2 horas extremadamente bellas. La fotografía de Claudio Miranda, labanda sonora de Michael Danna, los efectos visuales... todo está ejecutado de manera muy convincente y llamativa. Olvidarse de la actuación de Suraj Sharma debería ser pecado. El esfuerzo físico que hace es impresionante. Habría que estar muy podrido por dentro como para no enamorarse de esta obra maestra.
Este final de la trilogía es la mejor entrega con diferencia. El guión firmado por Linklater, Delpy y Hawke es sobresaliente y las 2 últimas escenas duelen, y mucho. Julie Delpy y Ethan Hawke dan una auténtica lección de duelo interpretativo y es increíble la capacidad que tienen ambos interpretes de aguantar largas líneas de diálogos sin cortar la toma. "Antes del anochecer" desprende mucha realidad en su metraje y decir de ella que es una muy buena película es quedarse demasiado corto.
La mejor película para mí de este año. Superar a "Shame" lo veía muy difícil, pero es que lo ha hecho y con creces. Duele y emociona. En los ojos de Chiwetel Ejiofor vemos el daño que sufre Salomon, y eso con una interpretación normalucha no se consigue ni de coña. Lo que hace este hombre no es normal, al igual que Michael Fassbender. La escena final es el climax dramático que todos esperamos y el que escribe esto, admite que hasta sollozó en la sala. Gracias Steve McQueen por este regalo.
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