Crítica de "12 años de esclavitud" de Steve McQueen.

12 AÑOS DE ESCLAVITUD

Me mantendré fuerte hasta que recupere mi libertad

Hace un par de años, Steve McQueen dirigió "Shame", una obra que marcó a muchos espectadores por sus escenas explícitas de sexo y porque nos dejó 2 de las mejores actuaciones vistas en el cine actual (Mulligan y Fassbender brillantes).


Cuando se supo que el realizador británico iba a hacer una adaptación basada en las memorias de Solomon Northup publicadas a finales del siglo XIX bajo el título "12 años de esclavitud", podíamos predecir que no se iba a quedar a medio gas y que si tenía que recurrir a un duro realismo lo haría.

Esta película impacta. Duele. Es sufrimiento. Pero en algún momento llega a ser esperanzadora, a diferencia de los que pasaba en "Shame". Cuenta la historia de un hombre de color, que vivía como un hombre libre en Nueva York, trabajando como violinista y con una familia. Tras cenar con unos señores que le prometen promocionarle una gira, Solomon es drogado. A la mañana siguiente, despierta encadenado y como esclavo.
A lo largo del metraje, seremos testigos de 12 años de supervivencia, en los que la violencia y las continuas vejaciones se suceden en la población esclava.

La cinta busca emocionar, pero evita recurrir a recursos para lograr la lagrima fácil. Es natural y a servidor lo

dejó totalmente K.O... No lloraba tanto desde que vi el año pasado "Lo Imposible", a pesar de que sean dos puestas en escena muy distintas. Sientes rabia y no puedes evitar resignarte por la injusticia a la que se ve obligado el protagonista.

La interpretación de Chewitel Ejiofor es magistral. Una lección de cómo controlar las emociones en el personaje a lo largo de su desarrollo sin hacer una innecesaria sobreactuación a las que no tienen acostumbrados algunos actores en este tipo de roles.
Michael Fassbender es la maldad personificada. Odio infinito a su personaje y una standing ovation para él (también) que vuelve a estar que se sale. Merece junto a Ejiofor todos los elogios posibles.
La debutante Lupita Nyong'o aprovecha las escenas en las que sale, destacando una en especial que llega directamente al alma por la desesperación a la que se ve enfrentada Patsy. Está bastante bien, al igual que lo está la fría Sarah Paulson. Sus frases son breves, pero lapidarias a más no poder.
El resto del casting está muy bien elegido destacando a Benedict Cunberbatch y Paul Dano.

El guión está perfectamente escrito para mi gusto y el montaje estupendamente ejecutado. El diseño de vestuario, muy bien diferenciado a la hora de contrastar las prendas de los blancos y los negros y la fotografía muy cuidada con momentos en los que las sombras oscuras cobran una mayor importancia en la imagen. Para quitarse el sombrero el trabajo realizado para la caracterización de los esclavos con sus correspondientes heridas y cicatrices. Injusto que ni siquiera esté entre las preseleccionadas para competir al Oscar al mejor maquillaje del año.

"12 años de esclavitud" está llamada a ser una de las mejores películas de este 2013. Lo merece por su valentía y por tener las narices de mostrar lo que otros films de la misma temática no se atrevieron, con unos valores que sorprenden y que llegan directamente al corazón. Es un canto a la libertad y nos enseña el poder de daño que pueden provocar los hombres con sus acciones. La vida humana es algo frágil, y denigrarla es lo peor que a un ser humano le puede ocurrir. Y eso por mucho que no lo queramos asumir, en nuestro mundo globalizado todavía sigue pasando.

Llamarla obra maestra lo considero todavía precoz, pero decir que ha removido en mi interior sensaciones que hace años no sentía en una sala, lo llamo realidad.

LO MEJOR: Es una auténtica pasada y tiene escenas que son memorables. Impactante.

LO PEOR: Que el típico marisabidillo de turno diga que es manipuladora como ataque hacia el film.

NOTA: 10